Hoy toca comida internacional. En este caso he hecho una receta que probé en Brest, en la Bretaña francesa, pero que por lo que he podido averiguar, también es muy típico de Bruselas.
En el restaurante donde los probé, los ofrecían en tres salsas, la de apio que voy a hacer hoy, la salsa de curry y otra que no recuerdo bien como se llamaba, pero creo recordar que era algo picante.
Los sirven en cacuelitas totalmente rebosantes de moluscos y salsa, eso sí, los mejillones, de roca, de los pequeñitos pero que sabían a gloria. Es un plato para paladares muy finos, y os recomiendo siempre que sea posible, que lo degustéis a la orilla de la playa como lo hice yo. Como me acuerdo de aquella terracita de restaurante con vistas a aguas francesas. ¿Volveré?
Ingredientes:
2 kilos de mejillones limpios
200 gramos de crème fraîche
1 rama de apio
1 cebolla
1 vaso de vino blanco
perejil picado
aceite de oliva
sal y pimienta
Preparación:
– Sofríe en el aceite de oliva la cebolla y el apio bien picados.
– Añade el vaso de vino blanco.
– Cuando haya consumido un poco, y después de salpimentar, incorpora todos los mejillones y deja que se vayan abriendo.
– Echa la crème fraîche, remueve todo bien, y sirve bien caliente.


